TRABAJO INUSUAL
Desde hacía más tiempo del que podía recordar iba de pueblo en pueblo pidiéndolos, y los niños más mayores se los daban sin rechistar.
Los más pequeños, sin embargo, no solían querer desprenderse de ellos. Tal vez percibían la verdad. Cuando la noche llegaba, él los metía a todos en el carro y hablaba por primera vez con ellos. - Ya estáis en un lugar seguro. Yo os arreglaré y cuidaré de vosotros a partir de ahora. Y vuestra magia, la más poderosa de todas, me ayudará a seguir vivo por siempre para poder seguir haciendo este trabajo… salvar a los muñecos más viejitos de acabar en un basurero. |